A poco más de un mes de haber terminado uno de los años más estresante (si no es que el más) de mi vida, me doy cuenta que todas esas noches de desvelo y mis ataques de estrés y enojo de los cuales fueron testigos (¡lo siento, Andrea!) no eran más que una probadita de lo que la vida real me deparaba. El estrés de no saber cuando iba a quedar listo el libro, no se compara para nada con el estrés que he sentido durante las últimas dos semanas cada que alguien me pregunta "¿Y ahora qué sigue...?" o "¿Y tú a qué te dedicas?". Antes la respuesta a esa segunda pregunta era muy fácil, era estudiante y ya. Hoy el abanico de posibilidades es tan grande que me da pavor pensar en ese famoso "qué sigue".
En fin, este post va dedicado a ustedes, que durante 12 meses fueron una parte importantísima de mi vida. Les debo horas y horas de risa y recuerdos que, si pudieramos juntarlos, grabarlos y vernderlos de alguna manera, probablemente si no haríamos millonarios. En esos 12 meses, se convirtieron en una extensión de mi familia, y nuestro salón, con todo y olor a comida, se convirtió en una extensión de nuestros hogares.
Cada uno de ustedes jugó un papel importantísimo no solo en que el proyecto fuera un éxtio total, pero en que mi año lo fuera también. Entre el viaje a Mérida y la escapada a Playa, el hate comunal contra los asesores, las ocurrencias de Javier, la risa de Eli (y la de Evelyn), ese famoso "oh! Extranjeros", la calma total y completa de Peter en todo momento y el mes que nos la pasamos viviendo en CEDIM, me dieron anécdotas que me sobran y bastan para escribr otro libro... Y ya que estámos en el tema de libros, gracias por confiar en mí y permitirme escribir nuestro libro. Ver ese librote blanco impreso, con mis palabras en papel, listas para guardarse en una biblioteca fue verdaderamente un sueño hecho realidad. Gracias por dejarme escribir nuestra historia.
Evelyn, Ana, Mich, Báez, Sarahí, Braian, Peter, Elí, Javier, Monche, Ale, Caro y Andrea, gracias por dejarme ser parte de sus vidas y por ser parte de la mía. Les deseo lo mejor del mundo, no solo este año, sino el resto de sus vidas. Les deseo el mejor de los éxitos en todo ámbito. Por favor, no perdámos contacto, que les juro que nadie, nadie me hace reír como este grupo. Espero invitaciónes a sus bodas, despedidas, baby showers, etc. Tengan por seguro que tendrán su invitación para mi boda (obvio tengo con quién casarme, ¿no?...).
Here's to nights that turned into morning, friends that turned into family, and dreams that became a reality.
Gracias por todo, mis Sanahcatos queridos.
Xo,
-C.
Evelyn y Ana, #sinllorar, por favor.
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