El último post de películas de moda fue sobre The Intern, la nueva película de Anne Hathaway sobre la vida de la dueña de una start-up de moda en Brooklyn. La última vez que vimos a Hathaway en un papel de este tipo fue como Andy Sachs en The Devil Wears Prada.
En serio, esta película me puede encantar. La puedo ver una y otra, y otra vez sin hartarme de ella. Como mnecionaba en mi post anterior, TDWP describe a la perfección como era la industria hace 9 años. cuando vi esta película por primera vez, soñaba con usar un abrigo Chanel y zapatos Prada todos los días al trabajo. En serio pensaba que en automático tendría un trabajo así por el simple hecho de estudiar modas.
Estaría mintiendo si dijera que ya no sueño con el clóset de Andy Sachs y el trabajo de Miranda Priestly. Mi sueño es trabajar en Vogue, y Runway, la revista de la cual Miranda es editora en jefe, está inspirada en la famosa publicación de Condé Nast. Yo soy una de esas cientos de chicas de las cuales Miranda hablaba cuando le dijo a Andy que hay montones de chicas que quieren su trabajo.
Cada que veo esta película, me imagino a mi caminando por NY, entrando por las puertas de ese edificio café (por el cual pasé en febrero y me emocioné como no tienen idea), cargando el Starbucks de mi jefa con 10 cajas de Hermés en una mano y otras 10 bolsas de Prada, Valentino y Chanel en la otra... Ay, que lindo es soñar (no solo con el trabajo, pero con una jefa como Meryl Streep. Yes, please!).
En fin, creo que ya todos han visto TDWP al menos una vez, así que no tiene mucho caso que me eche una sinópsis aquí. Es de las pocas películas que aún tengo en DVD (junto con Breakfast at Tiffany's y Moulin Rouge). Ya quiero que hagan la película de la secuela, Revenge Wears Prada (si, ya leí el libro y me encantó!). Ver como van a evolucionar los personajes de Andy, Miranda y Emily me emociona e intriga un poquito más cada que pienso en ello.
Xo,
C.